El precio de los combustibles no deja de subir semana tras semana y esto, unido a la eliminación del descuento temporal de 20 céntimos por litro que estableció el Gobierno y del que disfrutamos durante nueve meses, ha hecho que la factura de combustibles sea cada vez más difícil de pagar.
Es por esto que muchos consumidores buscan alternativas a las gasolineras tradicionales o de marcas sobradamente conocidas, decantándose por opciones low cost. Pero, ¿nos fiamos de la calidad del combustible de este tipo de gasolineras? ¿Por qué es más barato?
La Asociación de Usuarios Financieros (ASUFIN) ha resuelto las dudas que teníamos respecto a este tipo de gasolineras y el producto que venden.
¿Por qué es más barato el combustible de las gasolineras low cost?
En España, el combustible que podemos repostar es el mismo en cualquiera de las gasolineras. La diferencia puede estar en los aditivos que eche cada una de ellas (o que sencillamente no añada ninguno). En cualquier caso, esto no tendría por qué marcar una diferencia en el precio final, ya que los aditivos que añada una marca que venda combustible más caro no tienen por qué ser a su vez más caros que los que añada otra.
La respuesta a esta pregunta pasa por analizar el modelo de negocio de cada una de las gasolineras. Mientras que unas optan por repostar por nosotros, otras han prescindido de más de un empleado. El resultado: autoservicio. Una manera de ajustar márgenes que puede influir en el precio final del producto.
Del mismo modo, estas gasolineras ajustan márgenes reduciendo partidas como el alquiler o compra de terreno donde se ubican. No es lo mismo el precio de una gasolinera céntrica o ubicada a pie de autopista que el de una ubicada a las afueras o en una salida que nos hace alejarnos de nuestro rumbo. Las estructuras y equipamientos más simples también pueden abaratar costes y esto puede reflejarse en el precio que paga el consumidor.
Por último, cuánta publicidad has visto de marcas como Repsol o Cepsa en las últimas semanas y cuánta de marcas low cost. Efectivamente, la publicidad tiene un precio y este lo acaban pagando los consumidores.
Desde ASUFIN nos recuerdan que «puedes confiar plenamente a la hora de repostar en las gasolineras low cost. Si con ello puedes ahorrar, abandona los falsos mitos. El combustible será el mismo en todas las gasolineras y todas cumplen unos estándares seguros de calidad a corto y largo plazo.»
Fuente: asufin.com
